We have always been here

Lena Nguyen - paperback

This “claustrophobic and dark” sci-fi thriller debut is “full of twisting ship corridors and unreliable characters” as it explores AI ethics and the effects of climate change (Kirkus Reviews).
 
Aboard a ship manned by humans and androids, one doctor must discover the source of her crew’s madness—or risk succumbing to it herself.

Misanthropic psychologist Dr. Grace Park is placed on the Deucalion, a survey ship headed to an icy planet in an unexplored galaxy. Her purpose is to observe the thirteen human crew members aboard the ship—all specialists in their own fields—as they assess the colonization potential of the planet, Eos. But frictions develop as Park befriends the androids of the ship, preferring their company over the baffling complexity of humans, while the rest of the crew treats them with suspicion and even outright hostility.
 
Shortly after landing, the crew finds themselves trapped on the ship by a radiation storm, with no means of communication or escape until it passes—and that’s when things begin to fall apart. Park’s patients are falling prey to waking nightmares of helpless, tongueless insanity. The androids are behaving strangely. There are no windows aboard the ship. Paranoia is closing in, and soon Park is forced to confront the fact that nothing—neither her crew, nor their mission, nor the mysterious Eos itself—is as it seems.

Este thriller de ciencia ficción, claustrofóbico y oscuro, debuta repleto de pasillos de naves intrincados y personajes poco fiables, mientras explora la ética de la IA y los efectos del cambio climático (Kirkus Reviews).

A bordo de una nave tripulada por humanos y androides, una doctora debe descubrir el origen de la locura de su tripulación o arriesgarse a sucumbir a ella.

La psicóloga misántropa, Dra. Grace Park, es enviada a bordo del Deucalion, una nave de reconocimiento que se dirige a un planeta helado en una galaxia inexplorada. Su propósito es observar a los trece tripulantes humanos a bordo —todos especialistas en sus respectivos campos— mientras evalúan el potencial de colonización del planeta Eos. Sin embargo, surgen fricciones a medida que Park entabla amistad con los androides de la nave, prefiriendo su compañía a la desconcertante complejidad de los humanos, mientras que el resto de la tripulación los trata con recelo e incluso con abierta hostilidad.

Poco después de aterrizar, la tripulación se encuentra atrapada en la nave por una tormenta de radiación, sin medios de comunicación ni escape hasta que pasa. Es entonces cuando todo empieza a desmoronarse. Los pacientes de Park caen presa de pesadillas de locura impotente y sin palabras. Los androides se comportan de forma extraña. No hay ventanas a bordo de la nave. La paranoia se cierne sobre ella, y pronto Park se ve obligada a afrontar el hecho de que nada —ni su tripulación, ni su misión, ni la misteriosa Eos— es lo que parece.