LaRose

Louise Erdrich - paperback

In this literary masterwork, Louise Erdrich, the bestselling author of the National Book Award-winning The Round House and the Pulitzer Prize finalist The Plague of Doves wields her breathtaking narrative magic in an emotionally haunting contemporary tale of a tragic accident, a demand for justice, and a profound act of atonement with ancient roots in Native American culture

“Incandescent…Erdrich has always been fascinated by the relationship between revenge and justice, but…LaRose comes down firmly on the side of forgiveness. Can a person do the worst possible thing and still be loved? Erdrich’s answer is a resounding yes.” —New York Times Book Review, front page review
 

North Dakota, late summer, 1999. Landreaux Iron stalks a deer along the edge of the property bordering his own. He shoots with easy confidence—but when the buck springs away, Landreaux realizes he’s hit something else, a blur he saw as he squeezed the trigger. When he staggers closer, he realizes he has killed his neighbor’s five-year-old son, Dusty Ravich.

The youngest child of his best friend, Pete Ravich, Dusty was best friends with Landreaux’s five-year-old son, LaRose. Horrified at what he’s done, the recovered alcoholic turns to tradition—the sweat lodge—for guidance, and finds a way forward. Following an ancient means of retribution, he and Emmaline will give LaRose to the grieving Peter and Nola. “Our son will be your son now,” they tell them.

LaRose is quickly absorbed into his new family. Plagued by thoughts of suicide, Nola dotes on him, keeping her darkness at bay. Gradually he is allowed shared visits with his birth family, whose sorrow mirrors the Raviches’ own. As the years pass, LaRose becomes the linchpin linking the Irons and the Raviches, and eventually their mutual pain begins to heal.

But when a vengeful man with a longstanding grudge against Landreaux begins raising trouble, he threatens the tenuous peace that has kept these two fragile families whole.

En esta obra maestra literaria, Louise Erdrich, la autora del éxito de ventas La casa redonda, ganadora del Premio Nacional del Libro y finalista del Premio Pulitzer La plaga de las palomas, ejerce su impresionante magia narrativa en una historia contemporánea emotiva e inquietante sobre un trágico accidente, una demanda de justicia y un profundo acto de expiación con raíces antiguas en la cultura nativa americana.

“Incandescente…Erdrich siempre ha estado fascinada por la relación entre venganza y justicia, pero…LaRose se inclina firmemente del lado del perdón. ¿Puede una persona hacer lo peor posible y aun así ser amada? La respuesta de Erdrich es un rotundo sí”. —Reseña del libro del New York Times, reseña de portada

Dakota del Norte, finales del verano de 1999. Landreaux Iron acecha a un ciervo en el borde de la propiedad que linda con la suya. Dispara con confianza, pero cuando el objetivo salta, Landreaux se da cuenta de que ha golpeado algo más, algo borroso que vio cuando apretó el gatillo. Cuando se acerca tambaleándose, se da cuenta de que ha matado al hijo de cinco años de su vecino, Dusty Ravich.

Dusty, el hijo menor de su mejor amigo, Pete Ravich, era el mejor amigo del hijo de cinco años de Landreaux, LaRose. Horrorizado por lo que ha hecho, el alcohólico recuperado recurre a la tradición (la cabaña de sudor) en busca de orientación y encuentra un camino a seguir. Siguiendo un antiguo medio de retribución, él y Emmaline entregarán LaRose a los afligidos Peter y Nola. “Nuestro hijo ahora será vuestro hijo”, les dicen.

LaRose es rápidamente absorbido por su nueva familia. Atormentada por pensamientos suicidas, Nola lo adora y mantiene a raya su oscuridad. Poco a poco se le permiten visitas compartidas con su familia biológica, cuyo dolor refleja el de los Raviches. A medida que pasan los años, LaRose se convierte en el eje que une a los Iron y los Raviches y, finalmente, su dolor mutuo comienza a sanar.

Pero cuando un hombre vengativo con un antiguo rencor contra Landreaux comienza a generar problemas, amenaza la frágil paz que ha mantenido intactas a estas dos frágiles familias.